El devenir de nuestro equipo sigue siendo el mismo, nada ha cambiado, jugamos con los mismos jugadores, con el mismo esquema y seguimos sin "jugar" a nada.
Hemos cambiado de secretario técnico, hemos cambiado de entrenador, y sin embargo todo sigue igual de mal. Es justo decir que llevan ambos muy poco tiempo en el cargo, que el secretario técnico tiene todo el mes por delante para mejorar la plantilla y que el entrenador necesita más tiempo para imponer su estilo de juego. Sin embargo no hemos visto la reacción que suele haber cuando se cambia de entrenador, los jugadores siguen a lo mismo, sin entrega y sin acierto.
A pesar del poco tiempo que lleva trabajando Lluis Carreras todos esperábamos ver una pequeña revolución en las alineaciones, esparábamos ver una mayor implicación de los jugadores para demostrarle al nuevo técnico que puede y debe contar con ellos. Nada de ésto hemos visto, seguimos perdidos en la mediocridad más absoluta, evidenciando partido tras partido que nuestro mayor problema es la falta de calidad de la mayoría de jugadores de la plantilla.
Quizás nuestro lastre económico no nos permita mejorar convenientemente la plantilla y debamos pensar más en el futuro que en el presente. Con estos jugadores no vamos a ninguna parte, y como me he cansado de repetir muchas veces es hora de mirar hacia la cantera, hacia los jugadores de nuestra tierra, tanto si están en nuestro equipo como si están en otros. Tenemos que buscar la implicación de los jugadores, tenemos que buscar su orgullo de zaragocistas y aragoneses, y tenemos que creer de una vez por todas en sus posibilidades.
Me canso de oir que los jugadores de la cantera no tienen suficiente calidad para jugar en el primer equipo, y sin embargo año tras año tenemos jugadores de las categorías inferiores en las selecciones nacionales. Sin ir más lejos dos jugadores juveniles acuden estos días a una convocatoria de la selección nacional sub 17.
Nuestro lastre económico nos va a impedir tener un equipo competitivo durante muchos años, debemos fijarnos en equipos que cuida, miman y valoran sus canteras, y que además consiguen buenos resultados deportivos con ellas.
Seguramente sea un idealista y no tengo ni idea de fútbol, aunque visto lo visto igual no estoy tan equivocado.
Como siempre repito ahora más que nunca debemos estar con nuestro equipo, no podemos ser aficionados de cabeza, debemos serlo de corazón.
Manolo Gómez
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